el tourmalet

La revolución de los sin nombre

Un escalador británico casi desconocido, Hugh Carthy, se ha propuesta seguir la estela de Pogacar y Geoghegan Hart

Hugh Carthy, en la contrarreloj de Ézaro. / EFE / kiko huesca

Casi es de agradecer que, con la misma edad, haya sido Hugh Carthy y no Felix Grossscharter, con sus tres eses y con un apellido fantástico a la hora de colocar su nombre en los titulares impresos, el ciclista que se ha propuesto seguir la estela de las sorpresas inaugurada en el Tour y seguida por el Giro, a la hora de buscar y encontrar un ciclista que no era el máximo favorito para ganar la carrera. Y, seguramente, si se busca un grado de sorpresa, fue mucho mayor la de Tao Geoghegan Hart en el Giro que la de Tadej Pogacar en el Tour. El británico del Ineos, vencedor de la ronda italiana, era un prometedor corredor de la escuela del Ineos y se sabía que tenía un brillante futuro, pero que debía explotar. Y bien que lo hizo en Italia. Pogacar llegó al Tour después del tercer puesto conseguido el año pasado aquí, en la Vuelta, y con el sello de corredor que podía ser el gran animador de la prueba, ¿pero hasta el punto de ganar la ronda francesa?