No hace más de 20 años era habitual que los buenos restaurantes de Burdeos y también de París ofrecieran a copas buenos blancos dulces de Sauternes, que los clientes disfrutaban en el aperitivo. La moda de lo seco relegó a estos grandiosos vinos a un plano secundario como acompañantes de quesos y foie-gras. Château Lafaurie-Peyraguey es uno de los grandes vinos de la región. La propiedad, con 36 hectáreas, fue adquirida por el suizo Silvio Denz –copropietario de Château Rocheyron junto a Peter Sisseck en Saint-Émilion y socio de Clos d’Agon–.
Sauternes 1er Grand Cru Classé 2015
Château Lafaurie-Peyraguey PVP: 85 €
Clasificado como 1er Grand Cru Classé, se elabora mayoritariamente con sémillon, sauvignon blanc y una pincelada de muscadelle, y va vestido con una exclusiva botella de René Lalique. Ahora, el 2015 se muestra espléndido, con notas de miel, melón, piel de limón confitado, hierba luisa y una dulzura equilibrada que lo hace fantástico bien frío como aperitivo o a 8ºC acompañando todo tipo de quesos azules y hojaldres de crema. En su bodega, seguirá afinándose en los próximos 30 años.