Los restaurantes de Pau Arenós

Restaurante Citrus: la gran cocina que el Delta merece

Aitor López practica la cocina inteligente en un hotel hermoso, el Tancat de Codorniu, con dos puntales: Àlex Nolla y Susanna Krcivoj

Bodega Borràs, en Barcelona: la gilda pasa del palillo al plato (y un menú de menos de 20 €)

Restaurante Kuzu: levantar la casa sobre los 'nigiris'

El sumiller Àlex Nolla, el cocinero Aitor López y la jefa de sala Susanna Krcivoj, en la terraza de Citrus. / Joan Revillas

Desde la mesa de Citrus, el paisaje interior del Hotel Tancat de Codorniu: el huerto fragante con más de mil cítricos en flor. Por la noche, el azahar es un hilo de olor que engancha con el pasado. Pero, ahora, de día, lo de fuera está dentro porque Aitor López, el cocinero, ha colocado las vistas sobre el mantel: una rodaja de naranja a la llama con una gamba blanca en salazón (con holandesa de sus cabezas) y, al lado, un gajo de limón con tartar de gamba roja (y sabayón del coral).