¿Fruto seco saludable?

¿Qué pasa si comes anacardos cada día?

anac / Pixabay

Los frutos secos, sin duda, son una de las mejores opciones para picar entre horas. Pipas, almendras, cacahuetes, avellanas, pasas... hay para todos los gustos y colores. De hecho, la Organización Mundial de la Salud los incluye entre los alimentos esenciales para llevar una dieta sana e, incluso, el consumir este alimento puede prevenir enfermedades y alargar la esperanza de vida.

Uno de los frutos secos más populares y económicos son los anacardos. Descubierto en 1558 y originario de Brasil, actualmente se cultiva principalmente en el sudeste asiático, Latinoamérica, múltiples zonas de África e incluso en Hawái.

El anacardo en realidad es la semilla del árbol Anacardium occidentale, y además de sabroso, tiene múltiples beneficios para la salud como antioxidante, reductor del colesterol, ayuda para la perdida de peso y diabetes, protector cardiovascular y fuente de magnesio.

Según la Organización de Consumidores y usuarios (OCU), se recomienda ingerir unos 30 gramos de frutos secos al día, que corresponderían a un total de entre 15 y 18 anacardos, dependiendo de las dimensiones del fruto.

Ojo con ellos: son tóxicos

No obstante, los extremos nunca son buenos y no debemos pasarnos con su consumo ya que, si comemos este alimento en exceso, debido al sodio que contienen pueden ser perjudiciales para el corazón.

También hay que tener especial cuidado ya que, a diferencia de otros frutos secos, no se pueden consumir crudos, ya que es sumamente tóxico. Esto se debe a que las hojas del árbol y la cáscara que recubren el fruto contienen un aceite llamado urushiol, el cual puede producir problemas e irritación en la piel y, en los casos más severos, si se consume en grandes cantidades puede provocar la muerte.

Es innegable que los anacardos tienen muchas propiedades beneficiosas, pero se deben consumir moderadamente y encontrar un balance para disfrutar de todas ellas.