El catedrático emérito en Nutrición y Bromatología del Campus de la Alimentación de la UB Abel Mariné es una figura prestigiosa en su campo. Su sabiduría queda reflejada en el libro 'El gran llibre de la nutrició' (Comanegra), que ha coescrito con la periodista Imma Amadeo. "La guía definitiva para comer y beber con calidad y buenos alimentos", puntualiza en el subtítulo de esa obra de referencia de la nutrición que ya va por la segunda edición en poco más de un mes a la venta. En este trabajo completísimo y voluminoso, que se ha posicionado entre los más vendidos en el apartado de no ficción en catalán, Mariné desmonta algunos cuatro mitos, cuatro falsedades sobre los alimentos. Aquí recogemos sus argumentos. 1 El pan engorda “Las calorías son excesivas vengan de donde vengan. Simplemente, se trata de no pasarse con productos que contienen una gran cantidad: es más fácil pasarse de calorías comiendo bombones o brioches que verdura. El pan no engorda si lo comes en cantidades moderadas y mantienes el equilibrio nutricional tomando muchos vegetales”. 2 El gluten no es bueno para la salud “Hoy en día veo que muchos alimentos se promocionan como ‘sin gluten’ o ‘gluten free’. ¡Pero no tiene sentido porque nunca han tenido gluten! Es una estrategia comercial que da a entender que es malo, cuando solo lo es para los celiacos, que suponen el 1% de la población. El gluten está en las harinas de todos los cereales panificables: trigo, centeno, cebada y un poco -pero no mucho- en la avena), y es el que facilita la textura del pan, que tenga buena miga, que no se seque, como los panes buenos de antes”. 3 Los huevos son malos por su colesterol “Eso que se escucha por ahí de que hay que comer pocos huevos porque tienen mucho colesterol no es verdad totalmente. Un huevo no tiene tanto colesterol como se cree porque no llega al límite máximo diario que se recomienda de 300 miligramos al día (200 y pico). En realidad, el colesterol de los alimentos tiene menos importancia de lo que pensábamos y quien tiene colesterol alto es por problemas metabólicos que se deben corregir, ingiriendo, lógicamente, menos alimentos ricos en colesterol”. 4 La carne roja debe excluirse de las dietas “Ya sabemos que el exceso de carne roja puede ser un factor de riesgo de cáncer pero en cantidades moderadas, no. En los países ricos, el promedio de ingesta de carne es demasiado elevado pero no se puede prohibir siempre que se integre en una dieta rica en frutas y verduras. Por eso creo que recibe críticas excesivas y sesgadas. De hecho, la OMS no desaconseja comer carne sino moderar su consumo”.