cuidado que queman

Las Fritas: patatas fritas con algo más

Las patatas fritas son las estrellas de este local del Born donde se pueden combinar con otros ingredientes y salsas

La pequeña sala de Las Fritas, cuya decoración desprende un aroma ’vintage’. / FERRAN IMEDIO

Poca gente se resiste a hincarle el diente a unas patatas fritas. Es un acompañamiento universal. Pero ¿qué ocurre cuando pasa a ser la comida principal y la guarnición es una butifarra artesana de Calaf, o unos huevos camperos, o beicon, o jamón ibérico, o unos pimientos de Padrón, o dos quesos (cheddar y emmental), o un chile con carne de ternera de Girona 'dry aged' y salsa de judías de Santa Pau? A esa pregunta responde la cervecería Las Fritas, que ha abierto hace poco en el Born tras el éxito de su 'take away', en el paseo Joan de Borbó, 12.

Puedes pedir las patatas fritas con esos 'toppings' a base de productos frescos y de proximidad y alguna de las salsas de la carta, la mayoría de ellas caseras (brava, 'allioli', yogur y hierbas aromáticas, cacahuete...) y llevártelas contigo andando. Será por variedad... Hay más de 20 posibilidades. 

Cono de patatas fritas de Las Fritas con pimientos del Padrón y acompañado de salsa de cacahuete y 'allioli'.FERRAN IMEDIO

O puedes sentarte en el pequeño local (¡milagro, no huele a fritanga!) y comértelas tranquilamente en un ambiente que recuerda a una tasca o una granja de toda la vida.

Las Fritas

Son patatas de calidad, crujientes por fuera y casi cremosas por dentro. Apenas te pringas los dedos, prueba de que la fritura es excelente. ¿Cómo las fríen? Guardan el secreto como oro en paño.

Pero en Las Fritas no solo hay patatas fritas servidas en conos de diferentes tamaños (el más barato cuesta 2,5 euros), sino que te puedes sentar en sus mesas de mármol y pedir unas croquetas de chipirón, jamón ibérico o setas trufadas, unas anchoas del Cantábrico, unas gildas o unos boquerones, todo ello acompañado de un vino o una cerveza, sea una caña o una 'birra' artesanal.