La exalcaldesa de Barcelona Ada Colau ha vuelto a defender "el pacto natural" de fuerzas progresistas como única salida para que la ciudad tenga un gobierno "potente" y el socialista Jaume Collboni no siga gobernando en minoría. Ha lanzado el aviso de que Barcelona en Comú quieren dialogar, dejando claro que si quedan definitivamente fuera del gobierno ejercerán una oposición dura: "Serermos propositivos, pero nos dejaremos utilizar", ha señalado en referencia al "voto de confianza sin nada a cambio" que ya han ofrecido en dos ocasiones.

Le apoyaron en la investidura y ahora para tratar de desencallar los presupuestos, pero Colau está agotando su aval y no dará más cheques en blanco. Sobre todo si prosperan medidas contrarias al grupo municipal que preside, en temas de vivienda o de "barra libre a las terrazas", entre otros ejemplos que ha citado durante la entrevista que ha ofrecido esta noche de miércoles en betevé.

La exalcaldesa ha reiterado que con tal de alcanzar una mayoría progresista no le importa gobernar a dos bandas o en tripartito con ERC, tras recordar que republicanos y socialistas "no se hablaban" en el anterior mandato y los Comuns tuvieron que hacer "de puente".

Pendiente de hablar cara a cara

"Por nosotros no será", ha dicho, lamentando que Collboni no la haya invitado aún a "sentarse" para hablar de una alianza que ella sí le brindó cuando fue alcaldesa. Ha descartado que el peaje a un acercamiento sea que ella deje al grupo municipal que lidera, asegurando que mantienen una relación "cordial".

Colau confía en alcanzar un acuerdo para entrar en el gobierno: "¿Por qué tener un gobierno en minoría?", ha insistido, descartando que Collboni se decante por otros pactos. "Flirteaba con Junts, pero ahora parece que esa puerta se ha cerrado".