Emergencia climática

Riego de urgencia de 1.455 árboles en Barcelona para evitar que la sequía los mate

Un árbol seco este pasado verano en la montaña de Montjuïc, en Barcelona. / RICARD CUGAT

La sequía estresa. La escasez de lluvia, unida a las restricciones en el gasto de agua decretadas, somete a la vegetación en Barcelona a lo que los expertos denominan estrés hídrico, una falta persistente de nutriente que amenaza a los árboles y plantas menos capacitados a adaptarse a un clima repentinamente más áspero de la cuenta.