Ada Colau propone que Barcelona se convierta en la sede del mundial de fútbol femenino en 2031. La alcaldable de Barcelona en Comú lo ha explicado en una rueda de prensa en la sede la Agencia Efe en Barcelona en la que ha subrayado que Barcelona “es una ciudad que ama el deporte”.
La alcaldesa ha recordado que el fútbol femenino se ha convertido en los últimos tiempos en un fenómeno que genera una atención creciente y que Barcelona es “un referente” de este deporte. “Tenemos el récord mundial de asistencia a un partido femenino”, ha añadido en alusión al Barça-Wolfsburgo que se jugó en el Camp Nou el 22 de abril de 2022, y que reunió a 91.648 personas. De hecho, es el Gobierno central quién debe solicitar la cita, lo que ha destacado la propia candidata.
“Cada vez más niñas juegan a fútbol”, ha afirmado Colau, que ha considerado que organizar un mundial fenemino supondría “una gran oportunidad” de defender que este deporte reciba el mismo trato cuando jueguen mujeres y hombres.
Violencia contra la infancia
La candidata también ha propuesto la creación de un teléfono de asistencia a las víctimas de violencia contra niños y adolescentes, una iniciativa que contaría con cerca de 15 profesionales en una primera fase, número que podría ampliarse, entre los que figurarían personas relacionadas con la psicología, la atención jurídica, la social.
El servicio, que se haría de la mano de entidades sociales vinculadas con este tema, tendría un prespuesto anual de un millón de euros, y sus profesionales harían la función de escuchar a las víctimas o a personas de su entorno y también de actuar si es necesario activar mecanismos para asistirlos. Colau propone que además del teléfono se cierre un pacto de ciudad sobre la violencia contra niños y adolescentes.
La denuncia de Sirera
Colau ha mencionado la denuncia que el candidato del PP a la alcaldía de Barcelona, Daniel Sirera, ha presentado este viernes contra el ayuntamiento y la Generalitat por inacción policial durante las manifestaciones de la Bonanova por las ocupaciones de el Kubo y la Ruina.
Sirera, informa Betevé, se basa en que ni los Mossos ni la Guardia Urbana actuaron cuando personas que estaban en las viviendas ocupadas, ha dicho, “hacían barricadas y disparaban balines”. Según el alcaldable, hubo órdenes políiticas para que los dos cuerpos no hicieran nada: “Pedimos al juzgado que investigue qué autoridad dio las instrucciones”.