Óptica vecinal

Los barrios de la Ronda de Dalt pagan las pacificaciones en Barcelona: "Cada vez hay más tráfico"

Los atascos no solo dificultan la vida de los coches que circulan por ella, sino también la de los que la rodean

Retención en la Ronda de Dalt. / Ferran Nadeu

Lunes, once kilómetros. Martes, seis kilómetros. Miércoles, ocho. Las colas son habituales una semana tras otra desde hace incluso más años que las protestas. La Ronda de Dalt es la vía donde más crece el flujo de tráfico, un aumento del 8% desde 2015, de los 150.000 vehículos por día a los 162.000, según datos del reciente informe de movilidad del área de Urbanismo del Ayuntamiento de Barcelona para contrarrestar las críticas por la 'superilla'. La mayoría de calles salen bien paradas del estudio, pero en la ronda las cifras aumentan, en parte, por la desviación de los coches que evitan los ejes pacificados.