'Pisos' sin cédula

Más de 16.000 locales cerrados en Barcelona son candidatos a cambiar de uso

  • Diversos informes estiman que los comercios de planta baja cerrados han crecido entre un 15 y un 20% tras la pandemia, dando alas al debate sobre flexibilizar las condiciones para reconvertirlos en viviendas

Bajos reconvertidos en vivienda en Horta-Guinardó. / EP

El escenario pospandemia de la actividad comercial en Barcelona está marcado por una pérdida de negocios que aún se palpa gravemente en el centro, frente a muchas menos defunciones de la actividad en los barrios. Pero en unos y otros puntos se han bajado persianas que engrosan la cuota de locales cerrados en Barcelona, hasta los 16.000 o casi 17.000, según distintas estimaciones e informes. Con ese panorama y la certeza de que los peor ubicados (en términos de afluencia) difícilmente resucitarán como tiendas, desde el ámbito inmobiliario y de la administración de fincas resurgen las reivindicaciones de dar una nueva vida a estos espacios como vivienda, con el fin de paliar sobre todo el déficit de oferta de alquiler en la capital catalana, que no hace más que repercutir en un incremento de precios. El debate está servido, en tanto que el equilibrio de usos residenciales y económicos ha sido siempre prioritario en el modelo barcelonés.