El plan de radares del Ayuntamiento de Barcelona anunciado en marzo de 2021, a pesar de que recortado posteriormente, sigue en marcha. La ciudad ha anunciado que los radares de tramo previstos han empezado a vigilar a los conductores. Los cuatro nuevos controles velan por que se respete la velocidad marcada en un recorrido concreto fotografiando la matrícula los vehículos a la entrada y a la salida del mismo: la máquina realiza entonces una media para saber a cuánto iba el conductor. Si es superior a la estipulada en ese punto, se multa.
No obstante, el ayuntamiento ha revelado que, de momento, solo se enviará una notificación a los infractores, para alertarlos de ese incumplimiento de la normativa de circulación. Se trata de avisar a la ciudadanía, de avisarlos del incumplimiento de la norma, pero no se multará hasta dentro de dos meses. Ahora el objetivo es informar.
Velocidad limitada a 50 km/h y 60 km/h
Los nuevos radares de tramo están situados en tres túneles barceloneses y, el cuarto está en la Ronda Litoral:
Túnel de la Rovira, entre la plaza de Alfons el Savi y la rambla del Carmel. En ambos sentidos y con la velocidad limitada a 60 km/h.
Túnel de Badal (Ronda del Mig), de la plaza de Cerdà hasta la Diagonal. Dos sentidos de la marcha y un tope de 60 km/h.
Túnel de Glòries, de punta a punta y en ambos sentidos. Velocidad máxima: 50 km/h.
Ronda Litoral: túneles de Colom, Moll de la Fusta y Pla de Palau. Ambos sentidos y techo de 60 km/h.