Emergencia social

Ancianos que viven entre la mugre: "Es que no tengo a nadie"

Esta es la historia de una mujer de 77 años, vecina del Eixample de Barcelona. Vive en condiciones insalubres y se niega a ir a una residencia de la tercera edad. Una casuística "habitual" que se encuentran los trabajadores de las emergencias sociales de la ciudad.

Yanira Bedmar y Javier Martínez, dos técnicos del CUESB, atienden a Antonia en piso en el Eixample. / Ferran Nadeu (EPC)

La llamada de alerta llega a las 13.30 de la mañana. Pero la historia de Antonia se remonta a mucho antes. A los años 60 dejó Cádiz buscando trabajo en Barcelona. Hace cinco falleció su hija. Es, probablemente, el desencadenante que lo aceleró todo. La mujer vive en un piso repleto de mugre, completamente sucio y está absolutamente desatendida. Sus pertinencias están amontonadas en las habitaciones y los objetos personales están tirados por todos los lugares. "Es que en Barcelona no tengo a nadie", responde Antonia. Se niega a ir a una residencia y cree que la tarea de los servicios sociales en su casa es una pérdida de tiempo. Esta es una de las emergencias sociales más habituales que se encuentran los técnicos del CUESB (el Centre d'Urgències i Emergències Socials de Barcelona), personas mayores en situaciones de desamparo enorme en medio de una ciudad que vive indiferente a sus cuidados.