Movilidad y urbanismo

La entrada a Barcelona por el túnel de Glòries se abrirá la noche del 2 al 3 de abril

La galería estará 100% operativa y generará cambios en las calles de la plaza, donde el tráfico quedará restringido a vecinos, transporte público y servicios

El túnel de Glòries en sentido Llobregat, en Barcelona, se abrirá la noche del 2 al 3 de abril. Lo explica la teniente de alcalde Janet Sanz. / FERRAN NADEU / VÍDEO: ACN / MARIA ALADERN

Seis meses después de que los coches empezaran a atravesar las entrañas de la plaza de las Glòries en sentido Besòs, por fin hay fecha para que los conductores también puedan hacer lo propio en dirección Llobregat por el túnel viario que debe permitir alumbrar un gran parque de 12 hectáreas en la superficie, la Canòpia Urbana. Sucederá, si no pasa nada y si el clima no lo evita, la noche del 2 al 3 de abril, de manera que a las ocho de la mañana de ese domingo, la galería esté plenamente operativa tanto para entrar como para salir de Barcelona.

La apertura total del túnel de Glòries generará cambios en la movilidad del entorno. Se eliminan los carriles de circulación en superficie que quedaban en la Gran Via entre las calles de Bilbao y Padilla, de manera que solo podrán usar los laterales los vecinos o los vehículos de servicios, transporte público y emergencias. Los automóviles que entren a Barcelona por el nuevo corredor tendrán la opción de subir por Padilla (carril derecho) o por Marina (carril central). Más allá, en línea recta, como ya sucede ahora, solo podrán seguir los autobuses y los taxis, y por el lateral.

Principios de noviembre, cuando se abrió el sentido Besòs del túnel de Glòries

/ Jordi Otix

Estas modificaciones eliminan el giro desde Gran Via hacia la calle de la Independència. Los que usaban esta ruta para acceder a Aragó tienen dos alternativas: abandonar la C-31 en la salida 207 de Bac de Roda/Poblenou y llegar a Aragó por Bac de Roda, o bien cruzar Glòries y llegar a la autopista Urbana por Padilla o Marina. La calle de la Llacuna ya no conectará con Gran Via en sentido Llobregat y solo tendrá operativo un carril para acceder al lateral mal, en sentido Besòs. Entre Perú y Gran Via, Llacuna se pacificará y el tráfico se restringirá a vecinos y comerciantes. La apertura total del túnel supondrá una mejora para el transporte público, ya que el bus ganará un carril reservado hasta el otro lado de Glòries. A diario, según cifras del consistorio, entran por este punto cerca de 250 autocares, y salen una cifra similar, lo que supone cerca de 30.000 viajeros.

Menos coches

Todo esto coincide con el inicio de las obras para conectar el tranvía a través de la Diagonal. Los trabajos ya han empezado en distintos puntos de la avenida, y también en la misma plaza. A finales de 2023, ese es el plan municipal, los usuarios del Trambesòs ya podrán llegar hasta la parada de Verdaguer, en el cruce la avenida con la calle de Girona. A nivel de tráfico, el volumen de coches ha ido disminuyendo con los años. Cuando se derribó el anillo viario, todavía en tiempos de Trias, eran 95.000 diarios (45.000 en sentido Llobregat y 50.000 hacia el Besòs) y ahora son 78.000 (43.000 de entrada y 35.000 de salida).

En declaraciones a la prensa, la teniente de alcalde de Ecología Urbana y Urbanismo, Janet Sanz ha afirmado que el túnel es una infraestructura "indispensable" para la ciudad, que hará posible que en la plaza de las Glòries "haya vida, equipamientos, viviendas y escuelas". "El túnel no es una autopista para llegar al centro de la ciudad, mantiene la estructura que podría haber en superficie: dos carriles de circulación para el coche por sentido y una priorización del transporte público", ha subrayado.