Cuenta atrás del nuevo PEUAT

Barcelona no encuentra cómo regular las habitaciones de alquiler por días

  • La prohibición de los hogares compartidos con turistas divide al gobierno municipal sin que se plantee una fórmula que pueda blindar ilegalidades, mientras enfrenta a sus defensores y a los hoteleros

Concentración de la plataforma Som llars compartides contra la prohibición de las habitaciones para turistas en pisos particulares, el martes. / Elisenda Pons

Tras años reclamando herramientas para regular el pujante fenómeno de los hogares compartidos (habitaciones por días para turistas en pisos particulares, en presencia de sus titulares), al Ayuntamiento de Barcelona se le ha atragantado el desenlace. Ni se ponen de acuerdo los partidos municipales, ni mucho menos los afectados y los sectores económicos a falta de apenas unos meses para que se apruebe finalmente el nuevo o modificado PEUAT (plan especial urbanístico de alojamiento turístico), que en su versión inicial rechaza dicho uso (para menos de 31 días), tanto por la supuesta amenaza que supone para el parque de viviendas local, como por la complejidad de tenerlo bajo control. La capital catalana no encuentra de momento la fórmula para llegar a permitir la actividad, que llegó a sumar unos 10.000 anuncios en la ciudad.