Fiesta mayor a medio gas

Colau defiende la desescalada del ocio nocturno para frenar botellones en la Mercè

  • La alcaldesa asegura que tras la experiencia de este agosto se reforzarán los operativos de seguridad, que aún se están diseñando

  • Oposición municipal, vecinos y entidades claman por frenar el incivismo, mientras la oferta legal se reivindica como alternativa al descontrol

Uno de los conciertos de la Mercè de 2020, en el parque Güell. / FERRAN SENDRA (Delegaciones)

Ni será una Mercè normal, ni el foco estará solo en los escenarios. La alcaldesa Ada Colau sabe que tan complicado como planificar una fiesta mayor en pandemia va a resultar poner coto a los escenarios espontáneos y paralelos a la fiesta oficial. Con la experiencia de Gràcia y Sants, el ayuntamiento es consciente de que tendrá que "reforzar" operativos policiales de Guardia Urbana y Mossos, aunque todavía no tiene claro su alcance, que dependerá de la última hora de la pandemia y el Procicat. El mayor balón de oxígeno sería "ir reabriendo el ocio nocturno escalonadamente antes de la Mercè", ha defendido Colau, con la vista puesta en "evitar el efecto llamada" de una fiesta mayor que "no será de calle".