Nueva fase sanitaria

Los restaurantes ansían una revolución horaria pospandemia

  • La nueva etapa obligará a muchos establecimientos a reformular días de apertura y descanso tras ganar clientela en las franjas permitidas

  • El sector querría consolidar algunos hábitos heredados del año de restricciones, como las reservas tempranas tanto para comer como para cenar

Elaboración de un espeto de sardinas en el restaurante Belbo Candela, abierto recientemente en la Rambla de Catalunya, y que funcionará todas las noches de la semana a partir de este lunes. / RICARD CUGAT

El ritual, casi olvidado, de cenar fuera de casa habría tenido un éxito apoteósico de haber regresado en sábado. Los catalanes están ávidos de ágapes relajados (más complicados a la hora del mediodía), de socialización con brindis a la mesa y de reencuentros sin prisas bajo la luna. Pero hacerlo en domingo no forma parte del ADN territorial -poco dado a salir entre semana-, así que la gran mayoría de empresarios pospondrá el ansiado despegue nocturno unos días. No ha habido carreras para llenar las neveras, ni para reforzar las menguadas plantillas. Pero sí hay sesudo debate acelerado sobre el replanteamiento de los hábitos horarios y festivos: ¿Qué día debe ser el de cierre ahora que la demanda se ha vertebrado? ¿Es posible el sueño de doblar turnos a costa de consolidar las reservas tempranas? ¿Sobrarán aún más mesas hasta que no llegue el turismo?