Cambio urbanístico

Barcelona suma 805 licencias de cambio de uso de local a vivienda en 5 años

  • La pandemia frenó la actividad unos meses, pero la demanda de estas licencias sigue creciendo ante la falta de pisos

  • El ayuntamiento busca el equilibrio entre ganar domicilios y preservar el tejido comercial de los barrios

Un local de Gràcia que se anuncia como ’loft’ sin cédula, y otro en el que se ha instalado una puerta de vivienda, en el Eixample. / P. C.

El 2020 dejó, entre otros legados, la prioridad para miles de barceloneses de contar con un hogar con terraza, jardín, balcón o al menos buenas vistas. Pero la realidad inmobiliaria de la ciudad, con la vivienda por las nubes, hace que el precio sea el principal condicionante de muchas personas a la hora de comprar o alquilar un espacio para vivir, por lo que los locales de planta baja con posibilidad legal (o no) de reconvertirse en vivienda siguen al alza. El ayuntamiento ha legalizado el cambio de uso en 805 casos en los últimos años, aunque aún son muchos más los que se utilizan como domiclio sin cédula de habitabilidad ni posibilidad de regularización. Ni la pandemia ha cambiado esta tendencia residencial en la capital catalana, que podría incrementarse con fuerza ante la cantidad de negocios cerrados que dajará la crisis sanitaria.