Otra tienda histórica en peligro y la Baixada de la Llibreteria un paso más cerca de convertirse en una calle anodina, sin personalidad, franquiciada… una más de esas travesías sin carácter ni esencia que tanto abundan en el Gòtic. Una vía sin rastro del ecosistema comercial del que tanto se pavoneó Barcelona antes de vender su alma al turismo. Vamos, una Cardenal Casañas cualquiera. Pues la artería que bautizó el prelado era una vía con encanto hasta que el encanto fue desapareciendo víctima de la especulación y la globalización. En la Baixada de la Llibreteria –antes de la Presó, nombre que no gustaba a los vecinos y de ahí el cambio- aún no han llegado a la insustancialidad del purpurado paseo. Allí todavía quedan establecimientos que le dan cierto aire de calle barcelonesa: en la pastelería Colmena venden caramelos artesanos desde 1868; y en el Mesón del café sirven la bebida que le da nombre –la mejor de la ciudad, según aseguraba Pasqual Maragall- desde 1909; también ocupa plaza en la calle la cerería Subirà, que poca presentación necesita; y La Casa de les Sabatilles, establecimiento que desde 1950 pone confort a los pies pero cuya supervivencia peligra. No es una cuestión de rentabilidad comercial sino de amenaza de desahucio por codicia desalmada.
Barceloneando
La Barcelona descalza
La ciudad está a punto de perder otro comercio emblemático: La Casa de les Sabatilles, en el Gòtic
Sobre el local, uno de los pocos que quedan de su género, pesa una orden de desahucio
Los problemas de la tienda empezaron cuando el edificio fue adquirido por un gran tenedor
La casa de les sabatilles, comercio emblemático y uno de los pocos de su género que quedan en Barcelona, está en peligro de cierre a causa de un gran tenedor. /
Temas
Lo más visto
- Manolo García: “De estas elecciones me ha gustado que, de cada dos catalanes, uno no ha ido a votar”
- Marc Janeras: "Los gestores de Rodalies han conseguido vaciar el tren; están desmantelando el uso de la R3"
- Tres turistas catalanes mueren en un tiroteo en Afganistán
- Los bancos tendrán que ofrecer a sus clientes morosos renegociar la deuda antes de llevarles al juzgado
- Estos mutualistas se quedan sin recuperar su dinero de la renta