Los hoteles de BCN reformulan su oferta como única opción de cenas navideñas

La Navidad del 2020 será recordada como la más estresante de las últimas décadas para el sector de la hostelería, en especial en Catalunya. Con continuos cambios en las restricciones a consecuencia del avance de la pandemia, el colectivo ha tenido que reprogramarse hasta el último momento, incluso en uno de sus momentos punta del año en cuanto a facturación. Los hoteles se habían convertido en la mejor opción para cenar en horario no limitado (con el requisito de alojarse), pero las limitaciones que este lunes han entrado en vigor están obligando a los establecimientos a reformular sus propuestas para tratar de mantener las reservas. Estos negocios se han convertido ahora en la única opción para cenar fuera de casa en estas fechas, aunque con el tope de las 21.00 horas. Los restaurantes de estos establecimientos también son los únicos espacios que pueden alargar las comidas. La última resolución de la Generalitat limita a la franja horaria de 13.00 a 15.30 horas el servicio de comidas en la restauración. No obstante, la hotelería, como informó el domingo este diario puede ofrecer servicios hasta las 21.00 horas, cuando finaliza toda actividad económica no esencial. Este nuevo escenario ha llevado a muchos hoteles a replantearse la cancelación de las cenas clave de estas fechas, en Nochebuena y Nochevieja. Sin embargo, la mayoría van a intentar reconducirlas adaptadas a un horario estilo europeo, comenzando ágapes en torno a las siete de la tarde, para tener margen. Cambios sobre la marcha “Aún estamos estudiando qué podemos hacer sin incumplir la normativa”, explica el responsable de un hotel de cinco estrellas. Especialmente complejo es resolver el tema de las 12 campanadas de Fin de Año. Barajan opciones como música en directo en espacios comunes, o servir las uvas y el brindis en las habitaciones. O incluso la opción de que, bebida en mano, los huéspedes se puedan trasladar a consumir a las terrazas, sin que allí haya servicio. Una situación tan insólita que ha llevado a modificar a marchas forzadas los programas que ofrecían estos negocios, adaptando horarios y espectáculos. “Es un despropósito, porque esto no es algo que se pueda improvisar”, señalan desde el Gremi d’Hotels de Barcelona, que considera que el hotel se convierte por unos días en el segundo hogar de un cliente, donde no se le puede limitar el horario gastronómico. La patronal de hecho aún confía en una rectificación por parte del Govern, como ha solicitado, para evitar un “desastre” total. El colectivo vive un momento muy duro, con continuos nuevos cierres de hoteles que habían reabierto pero apenas tenían ocupaciones ante las progresivas medidas que afectan tanto a la hostelería como a la movilidad. En la actualidad solo se mantienen abiertos 114 hoteles en la capital catalana (26%), una veintena menos que en octubre. De estos, una treintena son de cuatro estrellas superiores, cinco estrellas o gran lujo, y son precisamente estas categorías las que suelen ofertar cenas y paquetes especiales para las fechas festivas. Normalmente, con opción para consumir y alojarse o no, al gusto. Pero en esta ocasión hospedarse es imprescindible para poder acceder a las cenas, ya que se considera un servicio al huésped, y no abierto al público. Siempre con distancias de seguridad, aforos limitados y despliegue de protocolos sanitarios. Cabe destacar que pese a todas las incertidumbres y complejidades, las reservas estaban yendo a buen ritmo para dichas fechas. En un clásico de estas celebraciones como el Majestic, cuentan que ya tenían casi completas las plazas para algunas fechas punta. De momento, van a mantener sus paquetes, ante la buena acogida que habían tenido entre la clientela de Barcelona o resto del territorio (70%), que busca una celebración fuera de casa en 'petit comité', así como de una pequeña parte de extranjeros (este año, franceses). También han mantenido su oferta, avanzando horarios, en el Hotel Arts, este año sin apenas turismo y con precios mucho más asequibles de lo habitual, que propone mesas reducidas en el restaurante u opciones para hasta seis personas de cenar en sus suites por Nochevieja. O en el Duquesa de Cardona, con una propuesta imbatible para Navidad de 222 euros por pareja (cena con música en vivo, habitación y música en vivo en su terraza acondicionada). Abierto solo unos días La coyuntura ha dado paso a muchas singularidades. Como la del lujoso Palace de la Gran Via, donde el hotel sigue cerrado pero lo abrirán del 24 al 28 y del 31 al 4 de enero, para posibilitar las estancias navideñas con gastronomía. En el caso contrario se sitúan los hoteles del mismo grupo Monument, España y Condes de Barcelona, donde como el alojamiento sigue cerrado, funcionan solo como restaurante, lo cual les ha llevado a tener que suspender las cenas del 24 y 31, aunque mantienen vigentes (hasta las 15.30 horas) las comidas de todos los días señalados, con bastantes reservas ya, tanto en el triestrellado Lasarte como en la Fonda España o el Oria. En el Hotel Claris, además de estos paquetes, han creado los bonos Derby Dreams, para regalar experiencias a los seres queridos, con validez durante un año. Unos y otros sacarán partido a sus terrazas en pleno invierno para aprovechar la mayor seguridad de los espacios abiertos. ALGUNAS PROPUESTAS PARA FECHAS SEÑALADAS EN LOS HOTELES -El Majestic sugiere alojarse en una de sus habitaciones y animar la tarde noche del 24 de diciembre degustando en su Restaurant SOLC tentaciones como Ferrero de foie con avellanas caramelizadas y flor de sal, Brioche de trufa, Cola de rape con gambas rojas y salsa verde o Lomo de novillo ecológico con parmentier de salvia, entre otras propuestas, entre las que no faltará el tradicional Tronco de Navidad con mousse de avellana y cremoso de limón. El paquete especial Nochebuena en Majestic cuesta 428€ (habitación doble Deluxe, cena y desayuno para dos la mañana de Navidad). También hay menú infantil. Las comidas de Navidad y Sant Esteban cuestan 80 euros por persona sin bebida. -En el Arts, para las cenas de Navidad y San Esteban y el almuerzo de Navidad, Enoteca (Paco Pérez, con 2 estrellas Michelin) despliega bocados de huerta, mar y montaña. Empezando con ostra en Bloody Mary, bombón de foie gras y trufas y lata de berberechos, para pasar a reinterpretaciones de los platos más tradicionales: del fricandó de gambas a la espaldita de cabrito lechal con guiso de invierno, finalizando con el suflé de chocolate y dulces de navidad. El menú degustación puede completarse con el alojamiento, con desayuno incluido y 'early check-in' y 'late check-out'. El menú degustación cuesta 150 euros por persona (bebidas no incluidas) los días 25 y 26. Con alojamiento, 495 para dos. -El Palace abre solo por las fiestas navideñas. Los menús diseñados por el chef Daniel Padró comienzan con diferentes aperitivos para compartir, un plato principal a elegir entre dos o tres opciones y un postre también a elegir, así como vinos nacionales y franceses. La cena de Nochebuena cuesta 115, la comida de Navidad sale por 135 y el ágape de Fin de Año por 490€. Tanto Navidad como Nochevieja cuentan con menú infantil por 60€ y 80€ respectivamente, y por un suplemento se pueden consumir en una suite. El alojamiento más cena cuesta desde 514 euros por pareja. -En Duquesa de Cardona servirán sus menús festivos en el restaurante Olentia. En Nochebuena hacen un pack de cena (ensalada de langostinos o sopa de cebolla; rodaballo o caldereta de cordero, más postre y bebidas) más alojamiento y desayuno para dos por 222 euros. En Nochevieja, 378 los dos. Los menús de Navidad y San Esteban cuestan 55 euros. El de Fin de Año, 110. El escenario clave será su terraza acondicionada con estufas y grandes vistas, y música en directo. -En The Serras la Nochebuena se entrará en calor en su Informal con un largo menú (para alojados) de 89 euros más bebidas que culmina con mero y espaldita de cabrito. El paquete con habitación en este premiado establecimiento que presume de las mejores camas de la ciudad vale desde 380 euros, para dos personas. -El hotel más fashion, el W (vela), ha dispuesto este años comidas y cenas el 24, 25 y 26 de diciembre en su restaurante Fire. Prometen un festín culinario junto al mar. Sus menús cuentan con varios primeros a elegir (suquet de rape, almejas y vieras a la brasa; tartar de vaca de Girona; ravioli de calabaza, mantequilla ahumada y ceps o sopa ahumada de galets) y segundos como magret de pato asado; filete de lubina relleno de duxelle de gambas; timbal de verdura a la brasa; carrillera de ternera o solomillo con patatas al horno y verduras. También diversos postres y bebidas incluidas, por 75 euros más bebidas. Su propuesta de Nochevieja se está reformulando dadas las nuevas medidas del Govern, aunque avanzan que las uvas se tomarán en las habitaciones y con vistas a un festival pirotécnico. Hay un paquete con alojamiento para esa noche de lujo desde 860 euros. -En Claris Hotel & Spa de Barcelona, el chef Aurelio Morales hará un recorrido gastronómico estos días en La Terraza del Claris que no olvida la sopa de 'galets' o el canelón de pularda, pero alcanza delicias como la zamburiña marinada, la crema de carabineros y trufa negra, o el tartar tibio de pescado blanco en escabeche y mejillones, avanza. Los menús cuestan 85 euros más IVA y bebidas, (225 el de Fin de Año), y desde 310 el paquete con habitación, desayuno y cena o comida. -El Monument está cerrado, pero en horarios de comida sí funcionará su restaurante Lasarte (Martín Berasategui), con opción de carta o degustación (280 euros) el día 24. El 31 han acortado su propuesta inicial para pasarla al mediodía, en una celebración anticipada por todo lo alto por 450 euros compuesto de platos como crema fría de ostras, erizos, falso risotto, lenguado a la brasa y Royal de pintada, entre otros. En el restaurante Oria, más informal, cuentan con menús desde 85 euros (San Esteban) y por 130 en Navidad.

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