equipamiento de emergencia

Barcelona cierra uno de los pabellones de la Fira para personas sin hogar

"No me queda otra que dormir en la calle en plena pandemia", protesta uno de los usuarios

El consistorio asegura no tener fondos suficientes para mantenerlo abierto y pide ayuda a la Generalitat

José Miguel Gil y Fernando Segura, dos hombres que se han quedado en la calle y que han vivido en el pabellón de la Fira de Barcelona los últimos meses.

"Fue bonito mientras duró, ahora no me queda otra que vivir en la calle en plena pandemia y es algo que me da mucho respeto", cuenta Óscar Sánchez, que ha estado más de seis meses viviendo en uno de los pabellones instalados en la Fira de Barcelona para atender, en plena pandemia, a las personas sin hogar de la ciudad. Este jueves el ayuntamiento va a decretar el cierre de este equipamiento de emergencia, aunque mantiene abierto otro espacio similar con 200 camas. Uno de los motivos, es el "inasumible" coste del espacio que el consistorio dice tener que costear en solitario. El ayuntaminto mantiene que todos los usuarios recibiran el apoyo de los servicios sociales municipales, aunque, fuentes del equipamiento gestionado por la Cruz Roja con el apoyo del ejército, confirman que un 20% de los hasta ahora residentes no han encontrado una salida en albergues municipales o habitaciones de realquiler, y deberán volver a la calle.