La emblemática Sagrada Familia ha reabierto sus puertas para homenajear la labor de los sanitarios y de los demás trabajadores esenciales que han estado en primera línea durante la crisis del covid-19. Este sábado, tras 114  días cerrado, el templo diseñado por Antoni Gaudí empieza la apertura gradual de sus instalaciones, que contará con tres fases. 

Este fin de semana y el que viene, día 11 y 12 de julio, se priorizarán las visitas del personal sanitario de los principales hospitales de la ciudad, a los agentes de los diferentes cuerpos de seguridad, al personal de entidades sociales y oenegés y a las organizaciones de empresarios y comerciantes de la ciudad. Más adelante, en la segunda fase, se abrirán las puertas para los residentes de la ciudad. Y, finalmente, en la tercera fase se permitirá la entrada de turismo local e internacional.

Este modelo de visitas, más cercano a los habitantes de la ciudad, se mantendrá durante un tiempo. Según se detalla en un comunicado de prensa, se priorizará el acceso de los vecinos "todas las tardes de los fines de semana se aplicará este modelo, hasta el 31 de diciembre". 

Para ello, el templo pone a disposición de los visitantes un calendario de visitas para reservar las entradas, disponibles a través de su página web.

Reapertura histórica

"En ninguna otra ocasión, en los 138 años de historia del templo expiatorio, ni tampoco en la etapa moderna de construcción del templo, se habían tenido que cerrar las puertas durante tantos de días, excepto durante los años de Guerra Civil de 1936 a 1939", explican desde la Archidiócesis de Barcelona.