Barcelona en Comú ha denunciado la aparición "los dos últimos días" de pintadas amarillas en forma de lazo en la fachada de su sede, en la calle Marina, y ha lamentado que "un símbolo antirrepresivo sea usado con fines partidistas y intimidatorias". El partido ha difundido este lunes unas imágenes a través de Twitter y ha asegurado que defenderá "una Barcelona plural que afronta las discrepancias con diálogo".
Las pintadas coinciden con las negociaciones para la investidura del próximo alcalde de Barcelona, que se disputan la líder de BComú, Ada Colau, y el cabeza de lista de ERC, Ernest Maragall. Colau se ha postulado para repetir en el cargo y tanto el PSC como el exprimer ministro francés Manuel Valls se han mostrado partidarios de investirla.
Por su parte, ERC ha condenado las pintadas y ha lamentado que los autores hayan utilizado "símbolos que representan la libertad y la democracia". "Las diferencias políticas no deben traspasar las líneas de debate abierto y del contraste de posiciones", han subrayado.