La Guardia Urbana de Barcelona investiga una estafa a unos 300 paradistes de rosas el día de Sant Jordi en la capital catalana.

Dos jóvenes de 19 años consiguieron engañar a unas 300 personas vendiéndoles un espacio a la calle que en un día tan señalado es gratuito.

El consistorio otorga unas 4.000 licencias en toda la ciudad para poder comercializar rosas aquel día, y los afectados habrían pagado entre 250 y 600 euros por una de estas falsas licencias, cosa que habría reportado a los estafadores entre 75.000 y 180.000 euros.

Según ha avanzado SER Catalunya y han confirmado fuentes municipales, los investigados cogieron documentación fotocopiada de una empresa donde había trabajado uno de ellos, y con estos datos, nombres, apellidos y firma, consiguieron pedir unas 300 licencias al Ayuntamiento, que se reparten de forma individual y no se pueden traspasar.

Cuando ya tenían los papeles y ya se habían agotado las licencias, las pusieron a la venta en internet: el permiso para instalar parada y un lote de rosas. Picaron sobre todo jóvenes y estudiantes que desconocen los trámites administrativos y sobre todo que ese día no se paga.

La Guardia Urbana mantiene abierta la investigación. Los dos jóvenes están siendo investigados por estafa, falsificación de documentos y usurpación, por haber suplantado la identidad otras personas. La investigación surgió a raíz del aviso de los servicios de licencias e inspección del consistorio.