Dos miembros de la organización juvenil de la Esquerra Independentista, Arran, se han encadenado este martes al dragón del Park Güell de Barcelona como pistoletazo de salida a la campaña para denunciar el exceso de turismo en la capital catalana y han desplegado la pancarta 'Paremos el turismo masivo".
Los Mossos han acudido al parque a liberar a los jóvenes de las cadenas.
"El Park Güell ha convertido en un icono turístico de Barcelona y es por eso que hemos querido dar el pistoletazo de salida a nuestra campaña veraniega aquí", ha dicho la portavoz de la acción, que también ha calificado el modelo turístico de "insostenible". A su juicio, el sistema capitalista es la raíz de donde parte "este turismo que atenta contra la vida de las personas" y que, por lo tanto, solo se podrá poner fin a estas problemáticas si se corta de raíz con el sistema.
El líder del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, Alberto Fernández, ha pedido este martes a la alcaldesa, Ada Colau, que "condene, persiga legalmente y sancione cualquier ataque de los radicales contra el turismo en la ciudad", y ha dicho que es imprescindible un discurso pedagógico frente a la 'turismofóbia'.
Fernández considera que el Gobierno de Colau "ha criminalizado al turismo para tapar su incapacidad de gestionarlo" y ha asegurado que los ataques -como el de los miembros de Arran que se han encadenado este martes en el dragón del Park Güell y las pintadas en el Gòtic 'Tourism kills the city', según ha citado-- perjudican la imagen de la ciudad y atemorizan al sector turístico.
El presidente del grupo municipal popular ha recordado que acciones como las del verano pasado, cuando un grupo de personas atacó un bus turístico y le pincharon las ruedas, no deben volverse a repetir, y ha reclamado a la alcaldesa "que no convierta el turismo en un problema para Barcelona, cuando debería ser una oportunidad para la ciudad ya que genera más 14.000 puestos de trabajo y representa el 14% de su PIB".
El año pasado, cuatro encapuchados asaltaron un Bus Turístic situado ante el Camp Nou, le pincharon las ruedas y llenaron de pintadas los cristales. Jóvenes de la organización, en la misma órbita que la CUP, también realizaron una acción en el puerto de Palma, donde lanzaron confeti y encendieron bengalas en la terraza de un restaurante.