La Enquesta de Salut de Catalunya (ESCA) circunscrita al área de la ciudad de Barcelona refleja una notable diferencia entre la salud cotidiana y los malestares crónicos –al margen de enfermedades imprevistas-que perciben las mujeres de todas las edades y la que relatan los hombres. Una recopilación de los datos reunidos entre los años 2011 y 2015 por la ESCA y difundidos por la Agencia de Salud Pública de Barcelona (ASPB) muestra que la prevalencia de la depresión o la ansiedad declarada por las mujeres dobla a la referida por los pacientes masculinos. Un 21,8% de las barcelonesas están diagnosticadas por trastornos depresivos o depresión grave, frente al 11,9% de los barceloneses que declaran ese sufrimiento.
El dolor de espalda afecta al 28% de las mujeres y al 16% de los hombres; en los doloers cervicales las distancias son también enormes: los sufren un 24% de las mujeres y un 10,5% de los hombres. La artrosis, degeneración ósea progresivamente invalidante, limita la vida cotidiana a un 29% de las barcelonesas y a un 15% de sus coetáneos masculinos.
ELLOS HIPERTENSIÓN Y COLESTEROL
Los barceloneses de sexo masculino sufren más hipertensión crónica (25,5% frente) que ellas: el 21,8%, y también muestran un ligero predominio en los niveles de colesterol en sangre demasiado elevados. La migraña y el dolor de cabeza afectan a ellas mucho más que a ellos: 20% frente al 7,5%. Las varices son otro territorio de afectación femenina: las sufren un 19% de las mujeres y un 7,3% de los barceloneses masculinos.
La incidencia de todas estas dolencias es claramente superior entre las mujeres que ejercen profesiones poco cualificadas: afectan de forma global al 36% de las que desarrollan tareas duras y pagadas, frente al 21% de los hombres en sus mismas circunstancias.
En el conjunto de Catalunya, los datos que los ciudadanos ofrecieron a la ESCA en el citado quinquenio reflejan el malestar predominante es el dolor de espalda, seguido de la hipertensión y la artrosis. En Barcelona, es la hipertensión el problema de salud más destacado.
La ASPB destaca nuevamente la importancia e influencia en la salud de la situación socioeconómica y del sexo a la que se pertenece. “Las mujeres viven, de media, más años que los hombres, pero sus indicadores de salud son peores. Las mujeres sufren más limitaciones en su vida cotidiana y tienen una peor salud mental”, indican.