Los alcaldes europeos pactan una red alternativa de acogida a los refugiados

La Radio Vaticana ha dado amplio relieve al protagonismo de Ada Colau, promotora del encuentro en Roma junto con las alcaldesas de Madrid y París

Pese a su apoyo explícito, el Papa no ha podido asistir finalmente a la reunión que 80 regidores han celebrado durante dos días en Roma

Las alcaldesas de Barcelona, Ada Colau, y París, Anne Hidalgo, en un encuentro anterior. / CARLOS MONTAÑÉS

Con el apoyo del Papa, pero sin su presencia, unos 80 alcaldes europeos han cerrado este sábado un encuentro de dos días en el Vaticano, en el que las ciudades se han propuesto crear una red de acogida de los refugiados como alternativa complementaria a las políticas europeas y han denunciado las leyes de la UE sobre migraciones y los compromisos incumplidos tomados por los gobiernos. La reunión humanitaria, auspiciada por el papa Francisco en el Vaticano, preveía el encuentro entre los ediles y el Pontífice, cita a la que finalmente este no ha acudido. 

La radio vaticana ha dado amplio relieve al protagonismo de Colau, promotora junto con las alcaldesas de Madrid, Manuela Carmena, y de París, Anne Hidalgo, del encuentro celebrado en la Pontificia Comisión de Ciencias Sociales, destancando su grito de “Basta guerras, basta racismo, basta muerte”. “O hay una Europa de la acogida o soncillamente no hay Europa”, ha dicho Spyros Galinos, alcalde de la isla griega de Lesbos, protagonista el pasado año de emigraciones masivas desde Turquía.

“El acuerdo firmado en Bruselas sobre el reparto de los prófugos que llegan a Europa es absolutamente decepcionante”, ha denunciado Giusi Nicoli, alcaldesa de Lampedusa, la isla italiana donde llegan la mayoría de pateras procedentes del norte de África. Contra la ausencia de una voluntad política europea de acoger a los refugiados se ha manifestado también Fernando Medina, alcalde de Lisboa, con frases que han repetido severamente la mayoría de los alcaldes presentes.

La ausencia del Papa

La ausencia del Papa ha sido excusada por monseñor Marcelo Sánchez Sorondo, canciller de la Pontificia Academia de las Ciencias y el coordinador del encuentro: "Como habréis notado, el Papa no ha venido. No quiero dar ninguna explicación de su ausencia, pero ciertamente no ha venido, porque hay algo que le ha complicado la vida". También ha añadido: "El Papa está con nosotros y seguramente muy contento de nuestra declaración final y de nuestro trabajo junto a él para construir puentes y no muros".

La radio vaticana ha citado a Colau cuando dijo que “las personas refugiadas no son un peso”, sino “nuestra esperanza frente a una Europa cuyos valores fundacionales han entrado en una crisis profunda frente al populismo xenófobo y el nacionalismo egoista”. Los refugiados son “la oportunidad de construir una Europa más fuerte, autentica referencia internacional de los derechos humanos”, añadió la radio del Papa citando a Colau.

El encargado de cerrar la sesión ha sido el legislador porteño y titular de la Fundacion Alameda, el argentino Gustavo Vera, y lo ha hecho con la lectura de la declaración conjunta firmada en la cumbre. En ella, los participantes en estas jornadas muestran la "necesidad de crear una red de alcaldes capaces de construir ciudades acogedoras, refugios, que sepan organizar corredores humanitarios seguros y regulares, reconocidos por la comunidad internacional". Una red, opinan, "centrada en el encuentro humano y basada en una visión animada de la interculturalidad con una participación activa de la sociedad civil".

Una nota del ayuntamiento de Barcelona subraya que la cumbre de alcaldes “se ha cerrado con un clamor unánime para reclamar a los Estados una acción más intensa para afrontar la crisis, además de pedir mayores recursos y competencias para favorecer la major de las acogidas posibles”.

En la tarde se inauguró en la plaza de san Pedro el tradiconal pesebre de Navidad, en el que los pastores, que en realidad tienen las semblanzas de refugiados, llegan a la gruta de Belén en una barca.

Los manteros, unos refugiados olvidados

El Sindicato Popular de Vendedores Ambulantes de Barcelona ha celebrado hoy el Día Internacional de los Derechos Humanos con la lectura de un manifiesto en el que afirman que "en Barcelona, los refugiados olvidados también somos los manteros". El manifiesto recuerda que ellos también han dejado todo atrás y han arriesgado sus vidas en el viaje. "Pero hemos llegado a una Europa en la que se nos niega nuestro derecho humano a ser refugiado. Cuando llegamos aquí intentamos ganarnos la vida de todas las formas, pedro la única salida que encontramos es la manta". Y los vendedores ambulantes de Barcelona denuncian: "Desde la cercanía de la Rambla, esa solidaridad desaparece. Desde la distancia, somos refugiados; desde la cercanía somos perseguidos, maltratados y expulsados", se lamentan.