El gobierno municipal ha logrado este martes pasar el trámite de la aprobación inicial de su propuesta de ordenanzas fiscales para el 2017, pero lo ha hecho sin alharacas, solo porque varios grupos se han reservado el voto para el pleno municipal de la semana que viene: no existen garantías de que para entonces el proyecto prospere, a la vista de las intervenciones de la oposición, que acusa al equipo de gobierno de ignorar el diálogo.

En la comisión de Economía y Hacienda, el primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello, ha defendido el proyecto de ordenanzas, presentado la semana pasada. Sus puntos fuertes son mantener congelado el IBI al 98% y subírselo al 2% con las viviendas más caras -una medida que ya figuraba en las ordenanzas del 2016-, así como un nuevo sistema de pago en el área verde y azul por el que los vehículos más contaminantes y de más tamaño paguen más.

El proyecto de ordenanzas ha recibido 15 votos a favor de los socios de gobierno, Barcelona en Comú y el PSC, y 13 en contra, los de CiU y el PP. ERC y la CUP, cuya posición es clave, ha reservado su voto, al igual que Ciutadans y la CUP.

La concejala de CiU Sònia Recasens ha sacado su artillería contra Pisarello, que quizá cansado tras su periplo suramericano y la polémica por el Born, no se ha apuntado de entrada al combate con ella, como suele. De hecho, el número dos de Colau no solo no ha entrado al trapo sino que escuchaba sosegado a su rival mientras se preparaba una infusión.

RIFIRRAFE POR EL APARCAMIENTO

Recasens ha lanzado una denuncia relevante: ha asegurado que dentro del proyecto de ordenanzas figura una medida destacada: la de que el área azul pase a ser de pago también de 8.00 a 9.00 y de 14.00a 16.00, lo que igualaría el horario con el área verde.

La concejala ha esgrimido un documento de previsión de aumento ingresos que aludía a cuatro millones de euros anuales: 600.000 euros de aumento

están calculados por el nuevo sistema. Y, según el texto, otros 3,4 millones vendrían de ingresar también de 8 a 9 de la mañana y de dos a cuatro de la tarde en el área azul.

El consistorio ha desmentido que esa posibilidad figure en las ordenanzas y ha informado de que es un documento de Barcelona de Serveis Municipals (BSM), una hipótesis de ingreso máximo que no está en la agenda. Para entonces, Pisarello ya se había acabado la infusión, y ha mostrado su enfado con Recasens por que la concejala haya hecho el siguiente tuit: “¿Por qué la alcaldesa, Ada Colau, esconde que ahora se pagará la zona azul a mediodía?”.

El primer teniente de alcalde ha hecho, a su vez, otro tuit contestándola: “Falso. Eso es una de los muchos estudios de hipótesis que hacen los técnicos.

No.tocamos el horario de la zona azul”. Y después ha explicado que había hecho el tuit y ha lanzado una frase que ha revolucionado la sala: “Suerte que la gente no sigue las comisiones municipales”. Varios grupos le han afeado lo que han considerado una falta de respeto, y él ha negado que lo fuera

Antes de que todo esto sucediera, el republicano Alfred Bosch ha reiterado de que hay que cumplir acuerdos para cerrar los nuevos. Carina Mejías, de Ciutadans, ha acusado a Colau de desdeñar el diálogo con la mitad de la oposición. Javier Mulleras, del PP, ha denunciado unas cuantas veces que Barcelona es la ciudad con la fiscalidad más elevada de España, y Josep Garganté, de la CUP, ha puesto dos condiciones para votar a favor de la aprobación inicial de las ordenanzas: que la tasa para autocares turísticos de Montjuïc y una tasa por ocupación de espacio público (colas de turistas) se apliquen desde enero del 2017..