"Somos una ciudad mediterránea y nuestros vecinos pasan mucho tiempo en la calle, por lo que hemos de destinar recursos para que ese uso intensivo del espacio público se pueda desarrollar en armonía", explica la concejala Janet Sanz para presentar el plan de convivencia de Nou Barris.

El plan, que se desplegará entre el 2016 y el 2019 y en el que se invertirán 2,75 millones de euros, incluye la incorporación de 23 agentes cívicos, 20 dinamizadores deportivos de espacio público, siete informadores cívicos en Roquetes y seis educadores en mediación en comunidades de vecinos. Es decir, una importante inyección de recursos humanos para fomentar la convivencia e intentar que las diferentes personas que utilizan las calles y plazas, no solo en verano, lo hagan sin molestarse las unas a las otras. 

DINAMIZAR LAS PLAZAS MÁS CONFLICTIVAS

Entre los proyectos concretos que recoge el plan destaca el trabajo para minimizar los problemas de convivencia en el Turó de la Peira y en el 'skate park' de Via Favència, se dinamizarán las plazas más conflictivas con actividades sociodeportivas y se promoverá la tenencia responsable de animales y el uso cívico del recientemente urbanizado Rec Comtal en Vallbona.

Para elaborar el plan el gobierno del distrito ha tenido en cuenta los datos de la útlima encuesta de victimización de la ciudad, según la cual el ruido en la calle y las molestias de los vecinos eran las principales causas de conflictos de convivencia en el distrito, seguidos del incivismo.

El conjunto del plan incluye 14 actuaciones agrupadas en tres ejes estratégicos: tolerancia, cooperación e inclusión; derechos y deberes en el espacio público y redes de corresponsabilidad. En este útlimo eje el municipio pretende "trabajar para generar espacios y herramientas que fomenten la participación de la ciudadanía en el diseño y la implementación de las políticas públicas para la convivencia". "Se favorecerá el empoderamiento de los colectivos en la toma de decisiones", concluye Sanz.