Benestar Social admite ahora que 14 menores bajo su tutela están fugados

La cifra coincide con el grupo de niños de la cola que causan alarma en Santa Caterina

La 'conselleria' y el ayuntamiento crearán un centro específico para su tratamiento para el que no hay fecha

Uno de los menores del ’Forat de la Vergonya’, saltando del solar en el que duereme, el lunes pasado. (Archivo). / FERRAN NADEU

Tres días después de que este diario se hiciera eco de que hay un grupo de menores enganchados al pegamento que pernocta en los alrededores del mercado de Santa Caterina, Benestar Social ha reconocido por fin que hay 14 niños tutelados por la DGAIA que se han escapado de tres centros de acogida (dos de ellos en Barcelona y uno en Manresa).

A pesar de admitir las fugas (el pasado martes no quisieron divulgarlas) y de que el número de escapados es muy semejante al de los menores del ‘Forat de la Vergonya’ (entre 15 y 20), el secretario de Afers Socials i Famílies, Francesc Iglesies, no ha querido vincularlas todavía con los niños del pegamento, con el argumento de que todavía no han sido identificados por los Mossos.

Más ayudas para los jóvenes extutelados

En la reunión entre los responsables de servicios sociales de la Generalitat y el ayuntamiento también se acordó establecer itinerarios de transición a la vida adulta cuando estos jóvenes alcanzan la mayoría de edad y dejan de estar tutelados, con el fin de facilitarles ámbitos formativos e itinerarios laborales dentro de las redes de acogida de servicios sociales. El anuncio se ha hecho público el mismo día en el que este diario ha informado de que solo uno de cada cuatro jóvenes extutelados reciben apoyo de la Generalitat al cumplir los 18 años.

IDENTIFICACIÓN POLICIAL

Una justificación que contrasta con la actividad que están llevando a cabo en la zona este cuerpo policial y la Guardia Urbana, ya que prácticamente los identifican a diario, según han confirmado fuentes de ambos cuerpos.

Iglesies y el gerente del Institut Municipal de Serveis Socials del ayuntamiento, Jordi Sánchez, también han reconocido ahora la “magnitud” y la “complejidad” del problema de “los menores inhalantes”, y que ambas administraciones tienen serias “dificultades” para abordarlo.

Por ese motivo han decidido aunar fuerzas e impulsar conjuntamente una serie de medidas para atajar el problema. Una decisión loable que llega, sin embargo, casi medio año después de que el vagabundeo de esos niños ya se hubiera detectado.

En la reunión que han mantenido esta tarde en la sede de Treball i Afers Socials, la ‘conselleria’ y el consistorio han acordado poner en marcha un centro piloto (abierto, de carácter diurno y que probablemente se ubicará en Ciutat Vella), en el que un equipo de profesionales especializados en atención sociosanitaria y adicciones atenderá a estos adolescentes.

PROYECTO SIN FECHA

Ese centro pionero será complementario a las casas de acogida en las que actualmente deberían residir esos chicos. La DGAIA, siguiendo las recomendaciones de los expertos, ha decidido que no es conveniente internarlos en centros cerrados de carácter terapéutico como los CREI y considera que será más efectivo combinar los dos tipos de atención que ahora se plantean. El único problema es que, de momento, no hay ninguna fecha prevista para poner en marcha este nuevo plan piloto.

Otro de los acuerdos es dar un impulso al Consorci de Serveis Socials de Barcelona, participado y dirigido por ambas administraciones, con el fin de que aborde decididamente este problema y para que ponga en marcha un plan director con el que pueda asumir nuevas competencias y servicios de atención.

La medida se tomará en un consejo extraordinario del ‘consorci’ que se celebrará “antes de un mes”. Y mientras tanto, ¿qué pasará con los niños? Se les identificará y se les conducirá de nuevo a sus respectivos centros de acogida, aunque nadie puede asegurar que no se volverán a escapar de nuevo, como llevan haciendo desde hace al menos medio año.  

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