"Cornellà tiene una joya de museo, comparable al de Nueva York o al de Alemania"

El cónsul japonés en Barcelona, Hiroyuki Makiuchi, ha convertido en un proyecto personal la búsqueda de financiación y apoyos para la muestra matemática

El cónsul general del Japón en Barcelona, Hiroyuki Makiuchi, en su despacho, el viernes pasado. / CARLOS MONTANES

Explica el cónsul Hiroyuki Makiuchi que, aunque lo pregunta cada vez que se le presenta la ocasión, solo tres personas de su entorno le han respondido afirmativamente a si conocían el Museu de les Matemàtiques de Catalunya (MMaca), con sede en Cornellà de Llobregat. "¡Solo tres personas!", exclama incapaz de salir de su asombro. Makiuchi, cónsul general del Japón en Barcelona, descubrió las instalaciones hace unos meses, cuenta, aconsejado por Jin Akiyama, el matemático más popular del Japón, donde dirige desde hace 25 años un programa en la televisión pública de su país en el que trata de acercar los números, la geometría y las matemáticas recreativas al gran público. "En mi país, Akiyama es más popular incluso que el primer ministro", comenta el diplomático, que habla un español impecable, fruto de los casi 25 años que ha pasado representando a su país en distintos países latinoamericanos.

El caso es que "Akiyama, que descubrió el museo en una visita que hizo a Barcelona, quedó gratamente sorprendido por la gran calidad del museo", prosigue el diplomático. "En algunas secciones, dijo, es mejor si cabe que el MoMath de Nueva York o el Mathematikum de Giessen, en Alemania", señala Makiuchi. "El de Cornellà es una joya de museo", exclama. Tan convencido quedó el cónsul que ahora ha decidido dar a conocer, divulgar y lograr financiación para el pequeño equipamiento. Es, ahora mismo, su proyecto personal más prioritario, confiesa el cónsul, que calcula que será suficiente con algo menos de 20.000 para editar nuevos materiales, mejorar contratos laborales y, de paso, buscar unas instalaciones más amplias para el museo.

Cada vez que tiene ocasión,  el cónsul habla del museo, ya sea el presidente Puigdemont o el representante de Casio en España

Por eso cada vez que tiene oportunidad, habla de él. Ya sea con el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, o con la 'consellera' de Ensenyament, Meritxell Ruiz, con quienes se ha reunido recientemente, ya sea con empresarios japoneses potenciales espónsores del Mmaca. "Ha habido ya contactos con Epson y con Casio", indica, sin atreverse a anticipar en cuánto van a quedar esas primeras conversaciones.

INICIATIVA CON UNA ASPIRACIÓN SOLIDARIA

Lo que más entusiasma a Makiuchi, no obstante, es la variante social y solidaria que puede tomar este proyecto casi personal. Los años que residió en países de América Latina le sirvieron, explica, para ver "cómo es de importante la educación, cómo ir a la escuela puede ser determinante para salir de la pobreza". De ahí nace su idea de que los materiales pedagógicos de madera que produce el museo de Cornellà puedan ser enviados a escuelas o asociaciones educativas de países pobres "de Sudamérica, pero también de África". De conseguirlo, "sería incluso posible solicitar alguna ayuda económica del Gobierno de Japón, que tiene presupuestos previstos para la ayuda a países en vías de desarrollo", apunta.

Entre otras muchas ventajas, las matemáticas tienen un lenguaje propio, se articulan a través de unos códigos conocidos internacionalmente y eso las hace accesibles a todo el mundo. Además (y esto ya no es cosa del cónsul, sino que lo dicen todos los pedagogos), su aprendizaje, a diferencia del de las disciplinas lingüísticas, está ligado a la capacidad individual de cada persona, dependen de cada alumno, sean cuales sean sus condiciones sociales o familiares. Son, en este sentido, la disciplina más equitativa e igualitaria. 

El seductor de las matemáticas

Akiyama es, además, uno de los especialistas de referencia de la teoría de los grafos, profesor y director del Research Center for Math and Science Education de la Tokyo Universtity of Science, investigador en distintas ramas de la geometría (ocupa un lugar destacado en la geometría discreta y combinatoria) y autor de más de un centenar de trabajos y libros científicos. ¡Ah! Y un enamorado del Museu de les Matemàtiques de Catalunya de Cornellà.