Colau elude toda autocrítica por la huelga del transporte público durante el Mobile

La oposición acusa a la alcaldesa de "falta de credibilidad y autoridad"

La edila se compromete a "hacer lo necesario para poner orden" en TMB

Colau, con la síndica de Greuges de Barcelona, que ha presentado su informe del 2015 en el pleno municipal. / JOAN CORTADELLAS

La huelga de los trabajadores del metro y los autobuses durante la celebración del Mobile World Congresshuelga de los trabajadoresMobile World Congress ha marcado la semana en Barcelona, y el pleno municipal de este viernes ha abordado la cuestión. La oposición ha acusado a la alcaldesa de “falta de credibilidad y autoridad”, términos que ha empleado el concejal de CiU Joaquim Forn. Forn ha subrayado que Colau se encuentra ahora al otro lado de la barrera, y ha recordado que en su día llamó a “echar a la mafia” de Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB). “Por primera vez se enfrenta a un problema real. Bienvenida a la realidad. Lástima que lo haya aprendido tan tarde”, ha proseguido el convergente, que ha instado a la alcaldesa a “asumir responsabilidades”. Pero esa petición no pasará de ser una frase en el debate, porque la dinámica de funcionamiento del consistorio ha permitido a Colau evitarse un trago amargo.

Ada Colau

alcaldesa de barcelona

"No tenía ninguna intención de criminalizar a los trabajadores del metro"

CiU presentó una moción de urgencia con la intención de que se debatiera y votara en el pleno de hoy, que lamentaba “la mala gestión, la actitud y la falta de previsión del gobierno municipal y de la alcaldesa en particular” al afrontar el conflicto laboral del metro. También exigía “la asunción de responsabilidades por la gestión de esta crisis”.

La alcaldesa tiene la potestad de rechazar mociones de urgencia presentadas 24 horas antes de la reunión del plenario. Por ello hubo una transacción que permitió a CiU mantener la iniciativa, aunque limó sus aristas por completo. La nueva moción tan solo lamentaba “la falta de acuerdo entre la dirección de TMB y el comité de huelga” y pedía al gobierno municipal “que retome las negociaciones para cordar un convenio colectivo”.

Quedaba utilizar el turno de palabra para colar algunas de las acusaciones que la moción perdió al ser transaccionada. Y eso es lo que ha hecho Forn, para mosqueo de Colau, que ha llegado a reprochar las invectivas al rechazar “el tono partidista de algunas intervenciones”. Era una forma sibilina de recordar que eso no era lo acordado. La alcaldesa ha evitado toda autocrítica. De hecho, apenas ha hablado, más allá de dirigir el debate.

Joaquim Forn

Concejal de ciU

"Por primera vez se enfrenta a un problema real. Lástima que lo haya aprendido tan tarde"

La moción de CiU ha prosperado entre las protestas del jefe de filas del PP, Alberto Fernández Díaz, que ha criticado al grupo por rebajar su texto inicial y le ha acusado de “decir una cosa en las ruedas de prensa y otra en el plenario”.

UNA GESTIÓN “TORPE”

La concejal de Ciutadans Carina Mejías ha calificado de “torpe” la gestión de Colau y le ha recordado que hace meses que se sabía que el conflicto del metro podía afectar al Mobile: “Ni usted misma sabe qué papel debía de ejercer”. El socialista Jaume Collboni ha afirmado que Barcelona “ha superado” la crisis de esta semana pero gracias a los ciudadanos, y ha llamado a evitar que vuelva a suceder. Más enigmático, el jefe de filas de ERC, Alfred Bosch, ha proclamado que lo que se necesitan son “bomberos” y no “pirómanos, sin que quedara claro si apuntaba a la alcaldesa. Por la CUP, Josep Garganté ha centrado su volcánica intervención en censurar en su totalidad la gestión de Colau en la negociación y le ha exigido que escuche “a los trabajadores, y no a los directivos”. “Le votaron para que hiciera las cosas de otra manera”, ha añadido Garganté.

Josep Garganté

concejal de la cup

"Ha sido una semana dura para ti. Ni te explico como la han pasado los trabajadores. Rectifica, Ada. Vuelve a tus orígenes".

LA BOLSA DE POLVO SAHARIANO

La cuestión ha vuelto a aparecer al final del pleno, a raíz de dos preguntas, una de Fernández Díaz y otra de Garganté. La del PP: ¿Qué valoración hace el Gobierno municipal sobre la huelga durante el Mobile World Congress? La respuesta ha correspondido a la concejal de Movilidad y presidenta de TMB, Mercedes Vidal, que esta semana ha sido objeto de duras críticas por parte de los trabajadores y la oposición por la gestión de la crisis. También se la ha acusado de ser desautorizada por el paso al frente de Colau para resolver el conflicto, que no se tradujo en éxito.

Lo que complicó la movilidad, ha dicho Vidal, fueron “legítimas expresiones de protesta, el Mobile y la bolsa de polvo del Sáhara”, bolsa que obligó a activar un protocolo que revisa las velocidades máximas e informa a la ciudadanía de alternativas de transporte. “Las administraciones hemos estado al frente para asegurar el éxito del Mobile y que la ciudad funcionara. Quiero agradecer a la ciudadanía que usara otros transportes”, ha añadido.

“CRIMINALIZAR" A LA PLANTILLA

Mercedes Vidal

Conncejal movilidad y presidENTA DE tmb

"Las administraciones hemos estado al frente para asegurar el éxito del Mobile y que la ciudad funcionara"

Después ha llegado la pregunta de la CUP sobre los sueldos de los 571 trabajadores fuera de convenio de TMB. Garganté ha apelado al alma de activista de la alcaldesa: “Ha sido una semana dura para ti. Ni te explico como la han pasado los trabajadores que han visto cómo la alcaldesa los criminalizaba. Rectitica, Ada. Vuelve a tus orígenes”. “No tenía ninguna voluntad de criminalizar a los trabajadores”, ha contestado Colau, quien ha asegurado sobre TMB: “Haremos lo necesario para poner orden”.

En defensa de la gestión de Recasens

Ada Colau ha defendido con vehemencia la gestión del comisionado de Seguridad, Amadeu Recasens, de quien el grupo de Cituadans pedía el cese inmediato por "la reiterada falta de respeto y consideración a la Guardia Urbana". El grupo ha aludido al hecho de que agentes del cuerpo fueron retirados de la zona de la Rambla en la que el domingo pasado los manteros vendían sus productos 'protegidos' por activistas. "Desestimo de forma rotunda su ruego", ha contestado la alcaldesa, que ha argumentado que la presencia de los activistas convertía los hechos en una concentración reivindicativa, por lo que debían intervenir los Mossos.