VIDA Y OBRA DE JOAN FUSTER

El legado de Joan Fuster

50 años después de la publicación de 'Nosaltres, els valencians', el Palau Robert ofrece una panorámica de su autor y presenta el libro 'Joan Fuster i Barcelona'.

Joan Fuster, a la izquierda, junto con su amigo Josep Pla, en Sueca, en noviembre de 1964. / ARCHIVO

En tiempos franquistas, el intelectual de Sueca Joan Fuster se atrevió a escribir un libro que reflexionaba sobre la historia política, social y cultural de Valencia. La obra respondía a una necesidad profunda del autor de hablar sobre los problemas de identidad de su tierra. Una preocupación que lo persiguió a lo largo de su vida y que renace de nuevo después de su muerte gracias a la exposición itinerante producida por la Universitat de ValènciaNosaltres, els valencians. 1962-2012,que comparte nombre con el mítico ensayo.

La muestra estará en el Palau Robert de Barcelona hasta el 17 de febrero y conmemora el 50º aniversario del ensayo que definió el pensamiento político y social del autor y los 90 años de su nacimiento. Dos efemérides que se complementan con la presentación, hoy a las 19.00 horas, del libroJoan Fuster i Barcelona,de Martí Estruch.

Esta nueva obra realiza un estudio de la figura de Fuster y de la estrecha y fructífera relación que mantuvo durante décadas con la capital catalana. El libro refleja el nivel de complicidad que el escritor adquirió con la ciudad y explica los importantes vínculos que creó con muchos de sus habitantes. Unas conexiones que le marcaron para siempre.

En la exposición se muestra documentación personal del autor y se dan a conocer datos sobre el proceso de elaboración del libro de 1962 -una obra que ha tenido 30 ediciones en catalán y tres en castellano- y de las dificultades que vivió por culpa de la censura del Estado franquista. Este obstáculo al final fue superado y permitió que Fuster dejase una huella imborrable en muchos historiadores, sociólogos, políticos y periodistas.

LEGADO MATERIAL // Además se exhibe una parte muy significativa de su herencia material, todavía poco conocida, como su correspondencia, propiedad de la Biblioteca de Catalunya, y muchas fotografías. Para la ocasión, también se ha contado con una serie de obras de arte coleccionadas por el autor como pinturas y dibujos, regalo de amigos suyos como Joan Miró, Antoni Tàpies o Rafael Armengol. Muchos consideran que la capacidad de análisis y de reflexión de Fuster lo convierten en una figura de rabiosa actualidad.