LaConselleria de Territori ha puesto en servicio el nuevo enlace a distinto nivel de laautovía C-17 y de lacarretera N-150 en la entrada aBarcelonaporMontcada i Reixac. Con la apertura de las dos nuevascalzadas elevadas (de dos carriles cada una) de la vía rápida que va hacia Granollers, Vic i Ripoll se evita el cruce con semáforos de larga duración situado a la altura de los barrios barceloneses deCiutat Meridiana yVallbona. Esta intersección causaba hasta ahora importantesretenciones, en especial en las horas punta.

Las obras en la zona, que tienen un coste de15,5 millones de euros, seguirán sin embargo hasta principios delpróximo año con trabajos deurbanizacióny acabado del entorno de la amplia rotonda que se ha construido debajo del paso elevado. Próximamente se suprimirán los semáforos existentes en el acceso a Ciutat Meridiana y en la salida de la calle de Sivatte.

Las nuevas calzadas elevadas destinadas al alto volumen detráfico de paso que registra la C-17 tienen una longitud de un kilómetro y una anchura de 11,4 metros. Para su construcción ha sido necesario realizardos viaductos paralelos de 130 metros de longitud. La rotonda que regula sin semáforos la circulación de carácter local de la N-150 al mismo nivel que hasta ahora mide, por su parte, 60 metros de diámetro.

Con esta actuación se complementa elsoterramientodel tramo urbano de la C-17 a su paso por Montcada, una obra que la Generalitat ya puso en servicio hace tres años. La finalización del paso elevado y de la rotonda coincide, asimismo, con la entrada en servicio la semana pasada del carril segregado para autobuses yvehículos VAO con tres o más pasajeros de laC-58 entre Ripollet, Montcada y Barcelona.