Los presupuestos del AMB para el 2016 son determinantes en la trayectoria de capacidad redistributiva social, territorial y económica de esta institución, y el resultado de la negociación entre los grupos políticos que forman parte del nuevo gobierno metropolitano PSC, Entesa i ERC.

Son unos presupuestos pensados en la vida real y eficientes en la asignación de recursos que  propone, pues aseguran la correcta financiación de los servicios públicos metropolitanos sin subir ninguna tasa, precio o tributo. Esto es posible porque el AMB se ha mantenido siempre saneada en términos económicos y financieros, y ha actuado como una entidad destinada a ofrecer los servicios de su competencia y dar apoyo a los ayuntamientos metropolitanos.

Por otro lado, los presupuestos para el 2016 también recogen nuestra ambición de equidad social, que se materializan en servicios y ayudas dirigidas a paliar las desigualdades y luchar contra la exclusión. Es por eso que hemos acordado mantener durante los próximos años los programas destinados a fomentar la ocupación, la lucha contra la pobreza energética, la tarificación social del transporte público y del agua, las ayudas a la rehabilitación de viviendas y un ambicioso nuevo plan de alquileres sociales.

Se trata, en definitiva, de aplicar los presupuestos  en favor de la cooperación y la solidaridad municipales, para construir una realidad metropolitana más inclusiva y a escala humana.