Un nuevo y agradable paisaje para Piqué tras las lesiones de Araujo y Koundé

En apenas 24 horas, el paisaje de Gerard Piqué en el Barça ha cambiado sustancialmente. Para Xavi, el técnico azulgrana, era desde agosto el quinto central de la plantilla. Quinto porque quedaba eclipsado por la consolidación de Araujo y la llegada del deseado Koundé, además del fichaje de Christensen y la firmeza que empieza a desprender Eric García. Pero en un solo día, el capitán azulgrana ha ascendido súbitamente ese escalafón hasta situarse como el tercer y último central que dispone Xavi tras las serias lesiones musculares que han padecido el defensa uruguayo en un amistoso ante Irán (ni un minuto duró en el césped) y el zaguero francés, que se rompía (minuto 21) ante Austria. La posición, junto a la delantera, con más recursos en la plantilla (había cinco) ha quedado reducida justo ahora en que el Barça se asoma a un período de la temporada decisivo, sobre todo en la Champions donde en 36 días se resuelve la fase de la liguilla de grupos. Y Xavi pierde ahora a sus dos pilares titulares, capaces ambos de ser desplazados al flanco derecho de la zaga. Sin piernas veloces Koundé, en realidad, ha jugado más de lateral diestro que de central. Y Araujo, que ya tuvo la misión de frenar a Vinicius en el clásico con el Madrid de la pasada temporada, se pierde el duelo del próximo 16 de octubre en el Bernabéu ante el equipo de Ancelotti. El enfado del técnico es mayúsculo porque todo el trabajo de prevención realizado en dos meses (cero lesiones musculares en los primeros ocho partidos del curso) saltó por los aires cuando los jugadores abandonaron la ciudad deportiva de Sant Joan Despí. El jueves caía Koundé con Francia; Memphis y Frenkie de Jong, con los Países Bajos; el viernes, Araujo, con Uruguay. En menos de 24 horas, más lesiones de carácter muscular (cuatro) que en el mes y medio anterior (cero). Además, Xavi pierde algo fundamental para su remozada estructura defensiva, que solo había encajado un gol en las seis primeras jornadas de Liga. Tres centrales similares Pierde el Barça la velocidad y capacidad de corrección que le proporcionan jugadores como Koundé y Araujo, acostumbrados a vivir sin vértigo alguno a 40 metros de la portería de Ter Stegen. Los tres centrales que le quedan al técnico mantienen el mismo perfil. Excelente salida de balón, inteligencia en la corrección, dominio del pase, pero sin piernas frescas y rápidas para correr atrás como requiere el sistema de Xavi para quien resulta imprescindible defender hacia adelante empujando al Barça a la presión. Y el calendario se empina justo en el momento en que ese tipo de piezas defensivas son más necesarias. El sábado le toca al equipo viajar a Mallorca, prólogo de cinco semanas endiabladas donde se juega su futuro en la Champions (el doble duelo con el Inter en una semana, del 5 al 12, es como una eliminatoria encubierta) y debe defender su candidatura visitando la casa del Madrid, Valencia y Osasuna, además de recibir en el Camp Nou a Celta, Villarreal, Athletic y Almería. O sea, ocho jornadas de Liga y cuatro de Champions para verificar la fiabilidad del fondo de armario de la plantilla en la que Piqué, forzado por las circunstancias, adquiere ahora un protagonismo inesperado, teniendo en cuenta su papel más que marginal en el primer tramo. Tan marginal que el capitán azulgrana es el décimonoveno jugador usado por Xavi de los 24 que posee en su vestuario. Los 135 minutos que ha jugado (18% del tiempo posible) le permiten adelantar solo a Memphis, Bellerín, Pablo Torre y los dos porteros suplentes: Iñaki Peña y Arnau Tenas. Momento más complejo Le llega, además, a Piqué esta oportunidad en el momento más complejo de su carrera deportiva, despojado como estaba de su condición de titular indiscutible, sumergido también en problemas personales (negocia su divorcio con Shakira) y expuesto como siempre está en el centro del escenario, con su elevado salario (es el jugador mejor pagado de la plantilla) transformado en un verdadero problema para el club. No sabía el capitán que en París, donde se lesionó Koundé en un choque de la Liga de las Naciones, y en Viena, un amistoso de Uruguay que le costó carísimo a Araujo, se le abría una puerta que parecía ya cerrada. Instalado como tercer central queda Piqué, aunque Xavi podría recurrir en caso de extrema necesidad a la opción de Frenkie de Jong, que ya desempeñó ese rol durante la pretemporada, o Marcos Alonso, que podría ser el central zurdo, una pieza que no existe en la plantilla.

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