Valgan las declaraciones de madridistas acérrimos. Ellos, sin excepción, en algún momento de sus pronósticos para los cuatro clásicos que comienzan esta noche, exponen sus dudas sobre el Madrid. Ayer mismo, Jaime Lissavetzky, exsecretario de Estado para el Deporte y candidato a la alcaldía de Madrid por el PSOE, se quitó «el gorro», tal como dijo, expuso su cariño hacia el Madrid y aseguró que su equipo ganaría todos los encuentros. Sin embargo, no olvidó unos datos fundamentales:«El Barça es un ejemplo y un equipo que tiene un juego extraordinario».
El viernes, cuando a Fabio Capello, extécnico blanco, le preguntaron a quién de los dos (Cristiano Ronaldo o Messi) nacionalizaría para que jugará con Inglaterra, respondió sin pensárselo dos veces:«Cristiano sabe inglés y Messi sabe de fútbol». Ayer, sin embargo, tras comprobar el estupor que su comentario había despertado en la capital española, quiso puntualizar la frase.«Cuando dije esto simplemente quise hacer un recorte a una pregunta porque los dos están a un gran nivel».
Otro seleccionador que no reniega de su pasado blanco es Vicente del Bosque. El técnico deLa
Roja se pronunció ayer con discreción sobre las diferencias que ahora existen entre ambos equipos. «Los dos tienen recursos suficientes para ganar las tres competiciones. Sin embargo, es verdad que el Barça ha tenido menos descuidos y por eso está por delante». El temor entre los seguidores blancos se amplía, más que en la Liga, en las semifinales de la Champions. La mayor esperanza blanca, tal como afirma todo un mito del Santiago Bernabéu como es Carlos Santillana, es conquistar la Copa del Rey, porque al Barça se le puede ganar más fácilmente en un solo partido que en un doble enfrentamiento.«A dos partidos, hoy por hoy, es muy difícil vencer al Barça», aseguró el exdelantero.
La poca confianza en el bando blanco contrasta con el vigor que se exterioriza en el sector azulgrana. Para empezar, el presidente del Gobierno. José Luis Rodríguez Zapatero no tuvo necesidad de mojarse, en su viaje por China. Con una frase lo dijo todo:«No hago porras, pero mi corazón está con el Barça».
Sin necesidad de ir tan lejos, sin moverse de Catalunya, la fidelidad y la confianza en el conjunto de Pep Guardiola es prácticamente unánime.«Lo que yo espero es que el Bar-
ça pueda ganar los cuatro partidos. No acostumbro a hacer porras porque casi nunca acierto pero esta vez creo que no voy a equivocarme: 1-3 (en la Liga), 4-2 (en la final de Copa); 1-2 (en la ida de la Champions) y 2-1 (en la vuelta del Camp Nou)». Tan segura como sus recetas; así se expresó la cocinera Carme Ruscalleda.
La fe barcelonista
Igual de confiado se mostró el nuevo presidente de la Federación Catalana de Fútbol, Andreu Subies:«Considero que el Barça, a nivel futbolístico es muy superior al Madrid. No tengo ninguna duda de que ganará en el Bernabéu, conseguirá la Copa del Rey y se clasificará para la final de la Champions». O un jugador exazulgrana, Michael Reiziger, que sufrió en persona la desolación de caer eliminado en las semifinales de la Champions, hace nueve años, en el último clásico continental.«En el 2002 perdimos la semifinal contra el Madrid porque ellos tenían mejor equipo y nosotros no estábamos con una situación tranquila en el club. Ahora, en cambio, el Barça es el favorito. Lo veo más fuerte».
Evaristo de Macedo, pura historia del barcelonismo, ya que fue el autor del gol que eliminó al Madrid en las semifinales de la Copa de Europa de 1960, también se mostró ayer pletórico en su confianza hacia el conjunto con el que jugó hace 50 años.«La ventaja del Barça es muy grande porque tiene un equipo que juega junto desde hace tiempo y está más acoplado. El Madrid, en cambio, tiene buenas individualidades y peor conjunto». Pura fe barcelonista.