La crisis climática en las ciudades

Badalona y Castelldefels reflotan el soterramiento de la C-31 en pleno debate sobre el decreto catalán de Zonas de Bajas Emisiones

Retenciones en la C-31 a su paso por Badalona, en una imagen de archivo. / Josep Garcia

El aterrizaje local en las ciudades del área metropolitana de Barcelona de la lucha contra la contaminación atmosférica de los vehículos no va a ser precisamente sencillo. A la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) de las rondas de Barcelona habrá que sumar ahora las ZBE que pongan en marcha los municipios de más de 20.000 habitantes a través de una ordenanza propia. Todo ello en el contexo de que el nuevo decreto catalán de ZBE entrará en vigor en los próximos meses y que, además, pesa el precedente del revés judicial a la ordenanza de Barcelona.