De Badalona a Sant Cugat: el PSC también gana el 23J en feudos de la derecha el 28M

De derechas en mayo, de izquierdas en julio. Ese es el viraje ideológico que define la tendencia electoral de estas elecciones generales del 23 de julio (23J) en diversas de las grandes ciudades catalanas del 'cinturón rojo' de la Barcelona metropolitana en las que una formación de derechas, bien el PP, bien Junts, ganaron las elecciones municipales del 28 de mayo (28M). Fuera de los fenómenos locales sin parangón como el de Xavier Garcia Albiol en Badalona, tal es la hegemonía socialista en el área metropolitana de Barcelona de los 3,3 millones de habitantes (casi 550.000 papeletas, un 38% del voto) que el PSC se impuso también en feudos donde la derecha había logrado hacer mella hacía tan solo dos meses. De hecho, en estas generales, los socialistas han logrado ser la fuerza más votada en los 36 municipios que componen el Àrea Metropolitana de Barcelona. La propia capital catalana, aunque no se la considera un feudo de la derecha, es un ejemplo del fenómeno. Si el 28M en Barcelona el Junts de Xavier Trias aventajó al PSC de Jaume Collboni en casi 20.000 votos, sin la dinámica electoral de las municipales fueron los socialistas los que ni más ni menos que triplicaron en votos a los posconvergentes, situándose con casi 240.916 votos (33,2%) como primera fuerza por delante de Sumar, PP y ERC, y relegando a Junts a la quinta posición. El 'voto útil' socialista Las elecciones generales no solo revelan un 'voto útil' socialista latente, sino que reafirman la potencia de liderazgos o arraigos ideológicos capaces de determinar localmente el voto en un sentido completamente diferente al que opera en una tendencia electoral general. El caso de los alcaldes Xavier Garcia Albiol (PP) en Badalona o Manu Reyes (PP) en Castelldefels son paradigmáticos. El 28M, ambos lideraron con mucha diferencia al PP como fueza más votada, superando al PSC por la friolera de casi 40.000 votos en Badalona y otros 7.000 en Castelldefels. Este 23J, sin embargo, el voto popular en ambas ciudades se ha 'tornado' socialista. En Badalona, el PSC directamente ha duplicado al PP de Albiol, situándose como primera fuerza con 40.000 votos. En Castelldefels no es tanta la distancia, pero los socialistas también son primera fuerza a unos 3.000 votos de distancia del PP del alcalde Manu Reyes, también presidente provincial de los populares en Barcelona. Sant Cugat: de bastión independentista al bipartidismo Entre el universo de mayorías absolutas socialistas (con permiso de Albiol) en la Gran Barcelona post-28M, Sant Cugat del Vallès destaca como la única gran ciudad metropolitana que registra una mayoría independentista en el Pleno municipal del Ayuntamiento. Las elecciones generales del 23J, sin embargo, han supuesto un cambio de tendencia en la ciudad de tradición convergente en la que Junts acaudaló el 28M casi el 30% del voto con unas 11.000 papeletas, más del doble que el PSC (4.313 votos), que se ha erigido en fuerza más votada este 23 de julio de 2023. Los socialitas han amasado en estas elecciones generales un 25,4% del voto, lo que se traduce en casi 12.000 papeletas, mientras que los posconvergentes quedan relegados a tercera fuerza con casi 8.000 votos. De hecho, los resutados de este pasado domingo también reflejan un cambio de tendencia en la ciudad vallesana respecto a las últimas generales de 2019, en las que ERC (con 11.480 votos) y Junts (9.585) se hicieron con la victoria en Sant Cugat. Además, es el PP, y no ERC (segunda fuerza en las municipales), la formación que se hace con la segunda posición en las generales (8.345 papeletas, el 17,7% del voto), instaurando un escenario de bipartidismo constitucionalista en una ciudad donde hace tan solo dos meses se hizo con la victoria el independentismo. Junts pincha en Martorell sin Fonollosa Una de las victorias más contundentes de todo el 28M fue la de Xavier Fonollosa (Junts) en Martorell (Baix Llobregat). Fonollosa fue el candidato de entre las grandes ciudades catalanas -las de más de 20.000 habitantes- que logró llevarse un mayor porcentaje del Pleno tras sumar 16 de 21 ediles posibles. Fonollosa, de perfil convergente y sin afiliación a Junts, gobierna así con mayoría absolutísima en una comarca donde las izquierdas dominan, en buena medida, gracias a un estilo muy personalista basado en la gestión municipal y alejado de fogonazos soberanistas o polémicas identitarias. En estas elecciones generales, sin embargo, el PSC ha arrasado con más del 40% de los votos (5.229 papeletas) y Junts ha quedado en sexta posición, con tan solo un 6,83% (855 votos). De este modo, se han posicionado también por delante de la formación con la que Xavier Fonollosa concurre a las municipales Sumar, PP, ERC y Vox, en este orden. Como ocurre en otras ciudades como Badalona y Castelldefels, con alcaldes con fuertes personalismos, el caso de Martorell en estos comicios tampoco es una sorpresa. En las últimas elecciones generales de 2019, de hecho, también el PSC fue la fuerza más votada (aunque con un porcentaje de voto muy inferior al logrado ahora) y Junts se posicionó en cuarto lugar.

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